CANCIÓN
s
Lo que cogía en mi mano
crecía en peso. Debes
entender que
no fue nada obsceno.
_
Llega la noche. Dormimos.
Entonces si lo sabes
dilo.
No finjas.
_
Las apariencias son
eso que visten nuestros enemigos. Tú
y yo vivimos
orando.
_
Desvalido. Desvalido,
debería hablar.
Podrías tú.
Qué piensas acerca de mí.
_
Ninguna mujer fue alguna vez,
fue más sabia
que tú. Ninguna es
más verdadera.
_
Pero el destino, el amor, el destino
me asusta. Lo que
cogía en mi mano
crecía en peso.
_
Robert Creeley.
s
Traducción de Vicente Gutiérrez.
ASCIENDE IMPREGNACIÓN PROFUNDA
Hace 14 años
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